Tras la fuerte crisis económica mundial que hemos vividos en los últimos años, el 2014 fue un punto de inflexión para el sector de la construcción. Por primera vez, en años, durante ese ejercicio se detectó un aumento de la actividad productiva. Lamentablemente, también se produjo un repunte en el número de accidentes laborales, cifras que no han dejado de crecer en los años posteriores. De hecho, como abogado de accidente en Madrid, puedo decir que la incidencia de estos siniestros se ha incrementado en un 23% en los últimos cuatro años.
Por su parte, los sindicatos advierten de que en el escenario socioeconómico que estamos describiendo han surgido bastantes empresas de baja reputación que no ofrecen garantías laborales y de seguridad a sus empleados. Las últimas semanas han sido nefastas para la prevención de riesgos laborales. Tras el derrumbe en Madrid de un edificio en obras en el que perdieron la vida dos trabajadores, el mismo día en el que se encontraba el segundo cuerpo caía un obrero de un andamio desde una altura similar a un quinto piso en Valencia.
En nuestro país la crisis se vinculó a la burbuja del ladrillo. Durante años la construcción o rehabilitación de edificios cayó enormemente. En 2014 la recuperación del sector comenzó de forma tímida, pero el crecimiento del mismo no ha dejado de crecer mes a mes. Los accidentes laborales vinculados con el sector también han experimentado un crecimiento al alza, desde el 2013 la cifra de siniestros y víctimas graves o mortales no ha parado de crecer.
Las cifras son igual de alarmantes tanto si lo medimos en términos absolutos como si lo hacemos tomando de referencia el índice de incidencia, fórmula que establece el número de accidentes que tienen lugar por cada cien mil trabajadores. Con esta operación podemos comparar los datos de diferentes ejercicios a pesar de la fluctuación en el número de personas contratadas.
Los expertos señalan que el aumento de la siniestralidad laboral está relacionados con el incremento de la actividad constructiva. Pero, también, hay que señalar que antes del estallido de la burbuja inmobiliaria veníamos de una tendencia a la baja. Sin embargo, desde hace cuatro años la siniestralidad ha alcanzado posiciones de vértigo.
Según datos facilitados por el Ministerio de Empleo, durante el pasado año la construcción fue el sector donde más subió la cifra de accidentes con baja laboral. Las víctimas mortales en accidentes de trabajo en la construcción sufrieron un crecimiento notable, registrándose un 18% más que en 2016. Es cierto que el sector se está recuperando, supone una gran recuperación para el PIB de este país y para la cifra de personas empleadas. Sólo durante el primer trimestre de este año, el sector se incrementó en un 6%.
En cualquier caso, es necesario destacar que se ha creado empleo en los últimos años. Las cifras reflejan esa mejoría, pero lo cierto es que también ha crecido la precariedad laboral. El sector de la construcción se encarga de desarrollar trabajos complejos y acciones en altura o en zonas de difícil acceso, lo que supone un riesgo asociado. En este sentido, los métodos preventivos y las medidas de seguridad se vuelven fundamentales para alcanzar el objetivo de siniestralidad cero.
Desde los sindicatos señalan que las condiciones inadecuadas de trabajo siempre han tenido lugar este ámbito productivo. Sin embargo, aseguran que nunca de tal magnitud como las que encuentran ahora. La grave crisis acabó con muchas de las empresas profesionales del sector y, actualmente, son muchas las organizaciones fraudulentas que emplean a varios trabajadores y hacen trabajos sin cualificación o experiencia previa. A su juicio esta es una de las causas más importantes para que seamos testigos de las cifras que hemos comentado a lo largo de esta entrada.
Las grandes empresas tenían protocolos de seguridad y contaban con la formación necesaria en materia de seguridad. Un factor clave en la preparación de los trabajadores que contribuye a minimizar el número de accidentes laborales. Las medidas de prevención y los equipos de protección individual también son básicas en la protección de los trabajadores.
Desde Indemnización por Accidente nos hacemos eco de esta información, ya que es necesario proteger a los trabajadores de las prácticas abusivas o ilegales. Los empleados que sufran un accidente durante su jornada de trabajo pueden denunciar los hechos y acceder a una indemnización. Sobre todo, si tenemos en cuenta que en tiempos complicados es más fácil reducir los gastos en materia de prevención y seguridad que en otras partidas.
¿y si ocurre un accidente laboral en la construcción? ¿qué derechos tenemos?
En caso de que ocurra lo peor y un trabajador de la construcción sufra un accidente cuya culpa no le sea atribuible al 100 %, tendrá derecho a exigir una indemnización por las lesiones causadas, y cuando hablamos de culpa, como posibles causas no atribuibles al trabajador están la falta de formación adecuada, el no disponer de los equipos de protección adecuados, herramientas defectuosas y muchas otras causas.
Además, en los casos de accidentes más graves, hay que tener en cuenta la importancia de la indemnización por seguro de convenio, muchas veces olvidada pero de gran importancia puesto que incluso siendo culpa del trabajador el accidente, si este quedara incapacitado para ejercer su profesión o falleciera, podría tener derecho a esta indemnización. El sector de la construcción es uno de los que contempla la obligatoriedad por parte de las empresas de contar con dicho seguro.
En indemnización por accidente somos especialistas en reclamar este tipo de indemnizaciones y también en reclamar seguros de vida que en muchas ocasiones son también olvidados…